Las fotos de la
semana desconciertan al oficialismo. A pesar de todos los intentos de los
últimos años para demonizarla a través
de la agobiante cadena de los medios hegemónicos, CFK continúa convocando
multitudes. Sin dudas, algo insólito en nuestra historia reciente. Desde el
retorno a la democracia, ningún
mandatario despertó tanta pasión, salvo Raúl Alfonsín, pero mucho tiempo después
de dejar la presidencia. Desde que salió de su casa en El Calafate hasta que saludó
en el balcón de su departamento en la CABA, Cristina no estuvo sola. Y, a pesar del mal tiempo, miles y miles
estuvieron en Comodoro Py para acompañarla
en esta incoherente y vengativa indagatoria judicial. Mientras tanto, el
presidente off shore debe conformarse
con actos en compañía de funcionarios e invitados obligatorios, vallas callejeras despobladas, casi
nula repercusión mediática y algún que otro empujón de un ciudadano indignado.
El contraste es evidente y demuestra que el
tibio triunfo electoral no es más que una travesura numérica de la que muchos
están arrepentidos.
Travesura que ya
está dejando huellas de desigualdad y recesión. La Revolución de la Alegría es un verdadero bajón. En cuatro meses,
el Gran Equipo no ha tomado una sola medida que pueda alegrar a nadie, salvo a esa minoría ahíta de riqueza,
ésa que sólo ha producido angustia en la historia del país, ésa que hasta ahora
ha gobernado con su mafioso poder de daño a través de cómplices o marionetas,
civiles o militares. Hoy, uno de ellos
ha desembarcado en La Rosada y transformó el país en una empresa más
administrada que gobernada. En cuatro meses, no ha dejado promesa sin incumplir, derecho sin pisotear, conquista sin
romper.
En algo más de
120 días, el Gran Equipo confeccionó una pesada
herencia que será difícil desmontar. En poco tiempo hemos retrocedido
muchos años porque la receta de manual
que han aplicado no sirve para solucionar problemas, sino para generarlos.
En lugar de Pobreza Cero, agregaron más de un millón de pobres nuevos; lejos
del desarrollo, la caída del mercado interno está ocasionando cierre de
fábricas y negocios; en lugar de cuidar el empleo, convierten los despidos en una práctica cotidiana; si el déficit
fiscal era mínimo, ahora lo multiplicaron con la apertura de las importaciones;
la inflación, que no era un problema, se
transformó en acuciante. Encima su caballito de batalla –solucionar la
deuda con los buitres- cada vez se
complica más y amenaza con ser una de
las más cruentas trampas en las que hemos caído.
Uno se pregunta,
después de todo esto, si son
sorprendentemente tontos o inevitablemente malos. Por si todo esto fuera
poco, Macri intenta explicar y entusiasmar, pero sólo logra indignar. Pensar que estas medidas regresivas nos
conducirán a “un proceso de crecimiento
inédito” es no entender nada; creer
que los tarifazos “duelen y desesperan” al
empresidente es pecar de ingenuidad.
En lo que seguramente no está mintiendo es en que está “haciendo lo mínimo posible” para que “todos lleguemos a buen puerto”. Claro, casi todos nos damos cuenta
de que está haciendo lo máximo para
estamparnos contra el primer iceberg que se cruce en el camino.
Ninguna igual
En medio de este
tenebroso panorama, la venganza del establishment no salió del todo bien. Si el juez Claudio Bonadío pretendía
humillar a CFK, consiguió todo lo contrario. Si Mauricio Macri venía a
terminar con la Cadena Nacional, las
pantallas del mediodía estuvieron con Cristina. Si querían el fin de ciclo,
están haciendo todo para reiniciarlo.
Los miles que se convocaron en los alrededores de Comodoro Py serán los
encargados de hacerlo. La inconsistente causa en la que debió declarar se
convirtió en la excusa para su reaparición; la comunión entre la oradora y su público hizo retroceder al frío y al
final, invitó al sol para que se sume al reencuentro. Mientras Ella
iluminaba las pantallas, Macri balbuceaba desde un rincón de Salta, en la casi soledad de siempre, con más
tedio que épica.
Durante cuatro
meses, se burlaron de su silencio. Después de que habló, las harpías bulleron de envidia. Cristina lo explicó con eso del “respeto a la voluntad popular”, que
parece ser una obligación para los opositores, pero algo despreciable para el oficialismo. Cumplir con la voluntad
popular no sólo es aceptar los resultados por parte de la oposición, sino
también hacer realidad todo lo prometido
por parte de los oficialistas. “Nunca vi
tantas calamidades cometidas en 120 días”, lamentó Cristina, desde el
improvisado palco.
Además de eso, se
encargó de marcar el contraste de una protección mediática que blinda a un
presidente inaceptable con la alegría y
la esperanza que CFK inspira a sus seguidores. Una mujer que se enfrenta
sin fueros a todas las patrañas
mediáticas convertidas en denuncias judiciales, la persecución vengativa de
una mafia que termina enalteciéndola. "Estén muy tranquilos –aclaró- me pueden citar 20 veces más, me pueden meter presa, pero no callar”.
Y eso es lo que más temen las fieras que se acurrucan en rincones oscuros: Cristina tiene voz y sabe usarla mejor que
nadie. Sin fueros, sin el aparato estatal, sin la parafernalia mediática,
sin banda presidencial, Cristina convocó a más de 200 mil personas bajo una
lluvia torrencial. Y el país, sin dudas,
se detuvo por una hora y Ella volvió a estar en el centro de la escena.
La pavada por la
que un juez la citó no la transformó en una rea ni en una mártir, sino en una indiscutible líder tanto para
la política nacional como hacia el interior del Justicialismo. Desde ese
escenario impensado, CFK se encargó de formular muchas críticas a la gestión de
Macri, no sólo a su nefasta política
económica sino a su colorido prontuario. “¿Se imaginan si yo hubiese sido presidenta con antecedentes de ser
absuelto por contrabando agravado? ¿Se
imaginan si me hubiesen encontrado cuentas offshore a mí?”, se
preguntó. Cristina no tiene más fueros que el amparo de sus seguidores; Macri,
en cambio, ostenta una nociva protección tanto judicial como mediática y en lugar de rendir cuentas ante la
Justicia, juega a ser presidente. “Tanto
que buscaron la ruta del dinero K, se
encontraron con la ruta del dinero M”, ironizó Cristina.
Un detalle gracioso de la jornada del
miércoles fue la confusión de noteros y comentadores mediáticos: por costumbre o por mérito omitían el ‘ex’
cuando hablaban de La Presidenta. Detalle despreciable o significativo. Como si el ‘ex’ desentonase con el
cargo que ha ocupado durante dos períodos. Ineludible, indiscutible líder que
hasta propuso la construcción de un gran frente ciudadano que pronto se volverá
realidad. Por eso el ‘ex’ está de más. El deterioro de nuestra vida en estos
cuatro meses hace que muchos empiecen a extrañarla. Con Ella, el ‘ex’ antes de ‘presidenta’
parece sobrar; en cambio, con Macri, no
vemos la hora de agregarle un ‘ex’ gigante.
Cristina tiene voz, pero no es cierto que sabe usarla mejor que nadie.
ResponderBorrarSolo sabe alimentar a su grupo de fanáticos. Esos ya la quieren. El problema es el resto.
El pueblo real. Porque nadie compra que el pueblo lleva banderas y lo sigue a Luis D'elia. Ese no es el pueblo.
Crees que alguien se convirtió en cristinista luego del discurso de ayer?
Bossio, compadre, la concha de tu madre! Bossio, compadre, la concha de tu madre! Que hermoso momento. Hasta a ella se le van de las manos.
Primero Scioli era el diablo, hasta que ella dijo que era el candidato y todos se alinearon. Ahora todos dicen Bossio traidor y, por el comentario de ayer, seguramente pase a ser bienvenido de nuevo. No es creible.
Lo que quedó claro ayer, es que no aprendieron nada y que, por suerte, son el pasado.
Pensar que alguien que convoque a esa cantidad de gente es el pasado no es más que necedad. Última vez que publico un texto sin firma.
BorrarEl reclamo de la clase media y baja es y siempre va a estar presente. Por algo los sindicalistas estaban reunidos con Macri.
BorrarEso es lo que no queres ver. Lo que paso es el Kirchnerismo hasta que no tengan la conviccion para pedirle a CFK que demuestre su inocencia en las causas que impulsa Margarita Stolbizer.
Federico Ramirez
Firmo ahora.
Siempre quedas enganchado con la idea de la corrupción, la gran estrategia del empresariado corrupto para condicionar a la política.
BorrarCristina es lo mejor que tenemos en la política desde la vuelta a la democracia. El que no entiende esto no sabe nada. Antonio Gomez
BorrarNo, Federico. Estás equivocado, Cristina no tiene que mostrar su inocencia. Son los que se la pasan acusando los que tienen que demostrar culpabilidad. Y hasta ahora, nada de nada, con todo el aparato judicial y mafioso a su favor. Con Macri, en cambio, ya su culpabilidad está demostrada desde hace rato. Lo que pasa es que lo perdonaron. Martín Calandra
BorrarA vos anónimo te digo que si el lavador profesional que tenemos hubiera ido a disputar la presidencia con Ella no pasaba del 25% de los votos. No más de ese porcentaje son los ultraliberales vendepatrias; el tema de la historia es que manejan el 90% de los recursos económicos de este País.
BorrarEfectivamente Federico, estas equivocado, es el sistema judicial el que debe probar la culpabilidad del imputado, por ahora lo unico que hay son falsas acusaciones como ese invento nefasto de un delito en donde hubo un simple acto administrativo cuyo daño al erario publico se dio cuando el nuevo administrador del estado decidio devaluar para empezar su alocada carrera a la dependencia del FMI. Esto ya se ha vivido en medio mundo, se llama neoliberalismo y si el pueblo Argentino no despierta de su letargo esta en riego de repetir lo vivido en los 90s. Y lo peor de todo es que podrian terminar acostumbrandose a esa normalidad inventada por las elites economicas como ha ocurrido en Mexico, Colombia y Peru para poner solo tres ejemplos cercanos. Ricardo
ResponderBorrarLos mejores años de los últimos cuarenta han sido los tiempos del kirchnerismo. Los números de la economía, los indicadores sociales y muchos expertos internacionales así lo confirman. En unos meses muchos advertirán cuánto hemos perdido. Liliana Triglia
ResponderBorrarPor favor no censures mas mis respuestas.
ResponderBorrarFederico
Lo que no te publico es tu promoción de Margarita Stolbizer, de la que ni hablo en mi texto. Si querés que te publique, comentá sobre lo que escribo.
Borrar¿En serio que Federico usa tu blog para hacer campaña a Margarita? Por favor, si apoya a Macri no puede hablar de corrupción. ¿Y no tiene una causa por enriquecimiento ilícito? Margarita... Mirta Palermo
BorrarSu honestidad intelectual los traiciona. Saben que no estoy hablando de Margarita Stolbizer, sino de su trabajo. Pero bueno, una vez más queda clara su posición de no traer a la mesa hechos concretos. Aprendieron de Anibal Fernandez, hablemos del que habla y no del tema en cuestión. Saludos amigos K, suerte con la vuelta.
BorrarFederico
Decirse progresista y apoyar a Macri es honestidad intelectual? Por favor... Fabiana Sosa
BorrarQue vuelta??? Si nunca nos fuimos!!!!! Macri nos empodera día a día!!!! Gracias Mauri! La gente "no k" ahora me escucha, me cree, se avivó que no me mueve un chori, sino la defensa de un modelo de inclusión que nos beneficia a todos, directa o indirectamente....en la economía, en la independencia de la patria....la soberanía...en fin, la corpo cipaya vende patria "fantasmeando" ganó las elecciones..... Pero a 4 meses que la mayoría ( por distraidos, desmemoriados, confundudo, fachos o lo que sea) le confió el timón de la nave, estos no pudieron con su genio o sus tiempos y dieron un viraje a la derecha de tal magnitud que la dejaron pata para arriba, con daños ya incalculables en $ y en años de dolores de cabeza.....ahora tendremos que arreglar el desaguisado nosotros, los K, que sólo queríamos descansar un poquito.... A estos nenes ricos no se los puede dejar solos al mando ni unos meses che!!!!
ResponderBorrarMuy buen texto, Gustavo. mantengamos el fuego con notas que informen claramente y sin errores.Las personas piensan y no les gusta que les mientan.Bush tuvo su Katrina y Macri tiene y tendrá su Cristina. Mantengamos la unión y la fuerza. Un abrazo.
ResponderBorrarHéctor Alfredo
Excelente Gustavo ! Yo estuve allí en Comodoro Py,como una ciudadana argentina y pude ver a muchos compatriotas sin banderas partidarias (esto lo digo por el opinador que realza la imagen de Margarita (?) La que pidió "proscribir" a Cristina ? ) El 13 2016 será inolvidable no solo por la reaparición de una Líder de la talla de CFK; sino porque pudo verse allí a una parte del Pueblo Empoderado no de fanáticos...
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