Mientras
la sonda New Horizons vuela tanto como para llegar a los confines del sistema
solar, algunos humanos se arrastran
hasta parecer gusanos. La diputada Elisa Carrió amenazó una vez más con
alejarse de la escena política si las cosas no salen como ella desea. El
electorado, entre la espada y la pared: ella o la continuidad del proyecto. “Si gana Zannini, me voy del país” prometió
como si su presencia fuese más
importante que nuestra felicidad. Que nadie se ilusione: Zannini será
vicepresidente y ella seguirá haciendo lo que mejor sabe hacer, aunque con el patetismo que agrega la
desesperación. No tanto como el referente intelectual del PRO, Iván
Petrella, que cuestionó al Papa por no
defender a los medios hegemónicos o como Bonadío, que fue de excursión a Río Gallegos a realizar un
sencillo trámite con el objetivo de inspirar titulares de campaña. Hay humanos
que señalan el sendero y otros que avanzan hacia el horizonte, pero también
están los que sólo miran el dedo y los
que conspiran para entorpecer cualquier paso.
Como
si fuera un triunfo propio, los muchachos de TN exhibieron hasta el éxtasis las
imágenes que llegaban de la nave espacial no tripulada. Estaban entre eso y la patriada de Bonadío en Río Gallegos que,
con una tropa de asalto de la Policía
Metropolitana, allanó las oficinas de Hotesur por algo que no merecía
semejante operativo. Todo vale para demostrar que vivimos en el peor país del
mundo, que hasta Plutón es más habitable
que la Argentina arrasada por el kirchnerismo. Todo sirve para ocultar que
el candidato favorito del establishment seguirá procesado por la causa de las
escuchas ilegales, aunque la fecha del juicio oral se siga postergando al
infinito, tanto como la investigación del despojo de Papel Prensa. Ya no se puede con un manojo de jueces que
sólo son funcionales a la restauración de los peores momentos de nuestra
historia.
No
buscan ninguna justicia ni quieren construir un país mejor. Sólo pretenden
volver a estar al mando para conducirnos al desastre. Revolver el río para que ganen los pescadores de siempre con la ayuda
de esos bagres que sólo mueven su boca para deglutir lo peor del barro
mediático. En función de eso, le dan entidad a cualquiera que pueda decir
algo en contra, aunque el blanco sea el antes idolatrado Bergoglio. Por más que parezca mentira, el PRO tiene
un referente intelectual. El legislador y director de la Fundación Pensar,
Iván Petrella, cuestionó al Papa porque “pone
más énfasis en la situación de las personas vulnerables pero no en los procedimientos básicos de una
democracia republicana, como la libertad de prensa o la libertad de
disidencia o de pensar distinto”. Palabras sobran para
desmontar estas gansadas, que avergüenzan más al que las aplaude que a quien
las dice.
Algunas cosas por su nombre
Tan poco vuelo tienen
estos pajarracos que deben inventar malas noticias para disputar el poder. A
punto de derrapar en la carrera presidencial, se aferran a cualquier cosa
que pueda demostrar un fracaso que no existe. Contra las afirmaciones de
organismos internacionales que destacan la disminución de la pobreza en
Argentina, la UCA insiste en su crecimiento. Y con cada informe, indigentes
y hambreados se multiplican como si fuera trébol en un campo en primavera. Periodistas
y políticos opositores, ignorantes de los pormenores de las estadísticas, sólo
recitan los números que confirman sus prejuicios y basan en ellos todos sus
análisis.
En todo caso, si las cosas
no están tan bien, deberían dirigir su mirada acusadora no hacia el Gobierno
Nacional, que ha hecho todo lo posible para redistribuir el ingreso, sino a
los integrantes del Círculo Rojo que apelan a todas sus tretas para impedirlo.
¿O no son ellos los dueños de cuentas no declaradas en Suiza, los que fugan
fortunas o evaden tributos ante el menor descuido, los que apuestan a la
ilegalidad del blue o se apropian del salario con aumento de precios? ¿O no son
ellos los que, a pesar de haber ganado como nunca en estos años,
invierten a cuenta gotas?
Si a pesar de las
paritarias libres, la disminución de la desocupación, el crecimiento de la
industria, la moratoria previsional, la AUH, el Progresar y todas las medidas
tomadas para facilitarnos la vida, la pobreza persiste hay que continuar por
este camino porque el que ellos proponen nos llevaría otra vez al punto de
partida. Los voceros del establishment nos quieren convencer de que el tortuoso
sendero de los ajustes, la austeridad y el endeudamiento disminuirá de un
plumazo las dificultades que denuncian. Ignorantes, hipócritas o cínicos. O
las tres cosas juntas.
La pobreza no decrecerá
con el individualismo neoliberal y eso lo saben porque ya lo hemos
experimentado. El modelo del derrame es una estafa porque los angurrientos no
dejan caer ni una gota. Mientras gran parte de los recursos estén en pocas
manos, la pobreza siempre será un problema. La única forma de disminuir la
brecha es bajando a los que están en la punta. Esta vez no nos engañan: el BID,
la FAO, el Banco Mundial, la ONU han destacado los enormes progresos realizados
en nuestro país en la lucha contra la desigualdad. Hasta las consultoras
privadas de nuestro país que no simpatizan con el kirchnerismo indican que la
pobreza se encuentra entre el 13 y el 17 por ciento.
Sin embargo, sólo
idolatran el índice de la UCA porque alcanza el 30 por ciento. Todo para
demostrar que los esfuerzos son vanos porque los pobres insisten en serlo. En
realidad, estas incoherencias tienen una explicación: no tienen vuelo ni
para defender el modelo que quieren reinstalar. Sólo serían coherentes si
dijeran que les importa un pepino la desigualdad y lo único que quieren es
tener al país al servicio de su angurria. Pero claro, así no los votaría
nadie. Por eso ladran por izquierda para morder por derecha, para engañar
algún bagre que muerda el anzuelo disimulado en el barro con el que se alimenta
a diario.
Hablan de la pobreza, como si nosotros fuéramos inconscientes. Como dice Cristina, nunca vamos a estar conformes con lo que hicimos. Falta mucho todavía. Terminar con la pobreza , la ignorancia, educar al pueblo es un trabajo arduo. Profundizar modelo. Seguir el proyecto. Ellos quieren reinstalar el modelo de los 90 donde se marginó a millones de argentinos. Buena nota Gustavo Rosa.
ResponderBorrarMuchas gracias. Abrazo enorme y gracias por leer mis esbozos de pensamientos
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