El casi empate en el balotaje es interpretado por el establishment como un
rotundo triunfo. Y bueno, de ilusión también se vive. Aunque nadie discute
que Mauricio Macri será el próximo presidente, desde el 10 de diciembre deberá afianzar su legitimidad en un terreno que
desconoce. Hasta ahora, llegó a La Rosada gracias a la protección mediática, la denostación amplificada y la fundamentación
de prejuicios, con el agregado de globos, amorosas frases de posters y la revolución de la alegría. Sin embargo, desde
las pantallas y antes de asumir, exige un acatamiento absoluto, como si fuese lo mismo un 51 por ciento
ante un solo oponente que el 55 por ciento ante seis. Si ellos hubiesen
reconocido a Cristina Fernández y a todos sus seguidores y apologistas a lo
largo de estos años, el futuro del
Ingeniero al frente del país sería más sencillo. Pero el desprecio que han
desplegado en esta década no hará tan fácil la convivencia entre las
dos mitades. No por rencor ni venganza, sino porque siguen pensando que los que no votamos por ellos somos alimañas
de charcas putrefactas.
Y esto no es exagerado. No sólo están exigiendo la
renuncia de funcionarios con mandato prolongado –Sabbatella, Vanoli, Bauer- y
de Gils Carbó, que tiene un cargo
vitalicio como un fiscal o un juez, sino también piden a los gritos que el
Congreso no sesione. Todo a pedido del artífice de esta pesadilla, el Ministro
desde las Sombras: Héctor Magneto. De cualquier modo, el Presidente Amarillo ya
debe tener los vetos preparados para
anular las noventa leyes aprobadas en una jornada intensa. Total, en su
distrito está acostumbrado a la vetocracia, cuando lo decidido por
los representantes del pueblo no satisface los caprichos de su Club. Un desconocimiento de las normas propio del
que está dispuesto a atropellar la República. Como la insistencia en
designar a Laura Alonso al frente de la Oficina Anticorrupción, que exige el
título de abogado y la diputada es licenciada en Ciencias Políticas. El mayor mérito que tiene no sólo es el financiamiento
de Paul Singer sino el de ser una feroz opositora al actual gobierno.
Además, con el afán de alcanzar la impunidad
cero, prometió que destinará todos sus esfuerzos en demostrar lo malo que
es Amado Boudou –una venganza por la destrucción de las AFJP-, en lugar de indagar en los prontuarios de
los futuros ministros y hasta del propio Macri. Por supuesto que el principal
objetivo del nuevo presidente es unir al país, pero antes deberá extirpar todo rastro de kirchnerismo, aunque eso
signifique menospreciar a casi la mitad del país.
Acerca de la pesada herencia
En esta contienda, el principal ganador es el Multimedios, como ordenador y difusor
del pensamiento único del establishment. Si uno solicita a un vecino que enumere cuáles son las
principales críticas que tiene hacia La Presidenta, recibirá un listado de chimentos elevados a la categoría de noticia:
un catálogo de hechos de corrupción ficticios, infiernos ilusorios, epítetos,
insultos y falacias sobre Cristina, funcionarios, periodistas y seguidores. La
que cala hondo –hasta en algunos de los votantes de Daniel Scioli- es la
soberbia. Casi desde los primeros días
de su primer mandato –además de bipolar, dormilona y frívola- La Presidenta fue
tildada de soberbia. Los últimos presidentes constitucionales han sido
calificados de cualquier cosa, menos de soberbios, aunque fueran insistentes en
el fundamento de sus decisiones. Ella, en cambio, sí. En esto hay un tufillo machista porque una mujer
implacable y decida no es adecuada como modelo para la sociedad. Una mujer, para Ellos, debe ser obediente,
sumisa y sobre todo, callada. Cristina, por supuesto, no es nada de eso.
Estos confundidores seriales transformaron convicciones, compromiso, conocimiento, claridad
conceptual y capacidad oratoria en un chisme de harpías envidiosas. Cuando
asuma el nuevo presidente, nadie dirigirá ese adjetivo hacia su figura. Sin
embargo, el calificativo le cuadra mejor porque es el personaje que, por gozar
de una posición social de privilegio, cree que lo sabe todo y pretende convertir su desconocimiento en sentido
común y lo peor, en plan de gobierno. Para el futuro: es más razonable la inmodestia del que ha estudiado mucho que la
petulancia del ignorante todo terreno.
Pero no sólo lograron convencer a los votantes de
que Cristina es la persona más soberbia del Universo: también con la inseguridad hicieron lo propio. Si hasta horas antes
de que comience el balotaje vivíamos en un país inseguro, desde el día siguiente desaparecieron de los medios dominantes los
delitos menores que antes amplificaban. El país cambió y eso sí fue magia,
pero de la perversa. Y también, por arte de magia, la inflación se transformó en sinceramiento, reacomodamiento y demás
eufemismos para que el público esté preparado para el futuro de abusos y
deterioro que se escondía detrás de las
angelicales promesas de los candidatos amarillos. Ahora vamos a padecer en serio la inflación y el ajuste,
pero Ellos apelarán a la excusa de la pesada
herencia del kirchnerismo.
Una mentira más. Tal vez sería conveniente una
Cadena Nacional, aunque sea de diez horas, en donde todos los funcionarios salientes expliquen cómo dejan el país, con
números y cuadros comparativos. Y que también estén los funcionarios
–empresarios y gerentes, en realidad- entrantes. Juntos deberían firmar todos esos informes como si fueran un acta para
que después no mientan cuando tomen las destructivas decisiones que tienen en
mente. Esa sería una verdadera
transición responsable. Porque la pesada herencia que recibe el Ingeniero y
su troupe de malandrines no está en los
números sino en los ciudadanos que como nunca han visto mejorar su calidad de vida.
Para que la sociedad comprenda que, si de acá en
más, aumentan las tarifas, devalúan la moneda, reducen beneficios sociales no será para acomodar las cuentas sino para
incrementar las ganancias de los que ya están empachados. Todo lo que
decidirá Mauricio Macri a partir del 11 de diciembre no será para beneficiar a todos los argentinos, sino para transferir
recursos hacia los miembros del Poder Económico. Los incautos votantes de
la engañosa fórmula Cambiemos deberán olvidarse de esas encantadoras frases de
campaña en donde aseguraban ayuda, amor y felicidad. Lo más justo sería que estas poco novedosas propuestas las padezcan
sólo los que se encapricharon con el marketinero candidato del establishment.
Sin embargo, las padeceremos todos. En realidad, la pesadilla se está materializando con los aumentos preventivos,
gracias a las expectativas generadas por la devaluación prometida.
El civismo indica desear que al nuevo gobierno le
vaya bien, aunque no se tiene en claro qué significa esto. Si el objetivo es engrosar
las arcas de los que más tienen, lo más
razonable sería desearles un absoluto fracaso, porque su éxito será nuestra
ruina. En todas partes del mundo, el modelo del derrame que van a
reinstalar sólo ha derramado miseria. Y ya lo hemos vivido. La pesada herencia que recibe Macri es la de muchos argentinos que han logrado
incorporar cosas impensadas, que incluye no sólo salud, alimento, educación
y vestimenta sino vacaciones, esparcimiento y renovación de aparatos
domésticos. La herencia es una Patria
que estaba incorporando a todos sus ciudadanos, pero la ola amarilla
desembarcó para interrumpir este proyecto. Por
eso, no sólo hay que desear, sino hacer todo lo posible para que fracasen.
Dejá de vivir en la ficción hermano. Decir que el gobierno estaba incorporando a todos sus ciudadanos no podés sostenerlo con ninguna estadística, ni siquiera tuvieron la dignidad de aceptar la pobreza o, al menos, la decencia para medirla.
ResponderBorrarNo contesto anónimos, aunque ya te estoy contestando. Del 50 % de pobreza en 2002 al 18 % en el primer semestre de 2015. Ponele el 26 de la UCA ¿No es una disminución? Del 75 % de cobertura previsional al 95. Si no hubiera inclusión, no batiríamos records de turismo cosa que antes no existía. Y la lista es enorme desde vulnerables hasta científicos. Hasta el Banco Mundial y la CEPAL colocan a la Argentina en los primeros lugares en la disminución de la pobreza. INFORMATE MEJOR
BorrarAnónimo=mediocre acomplejado:no es vivir en la "ficción",el gobierno no incorporó a todos los ciudadanos xq sería imposible en tan p/tiempo.No es estadísticas,es "realidad",los desplazados durante 60 años x diferentes políticas elitistas (desde la SRA)no los recuperás en 12años,es tarea q llevará vs años+(es+fácildestruir q construir)."Anónimo",tu pequeño cerebro amasado x los medios, te arruinaron la "única"neurona útil q hubiese dejado q reconozcas logros d esta gestión.......Si la recuperás?.... volvé,te atenderé con un poco +d paciencia.. Mi nombre es real, no soy cobarde q se esconde tras un perfíl,digo x si querés alguna aclaración personal,saludos
BorrarDejalo, Yrateo, ya se fue. Como hace todos los opos odiadores: tiran una piedra y después se esconden. Manipulados, prejuiciosos y despreciadores se creen tan inteligentes que nos han puesto en la boca del lobo. Y encima, sin fundamento, creen que vamos a estar mejor con las bestias neoliberales. Cuando pierda algo de lo que tiene, va a usar el argumento de Bonelli: "e' pod la pezada hedenzia".
BorrarComo hablan al pedo, laburo durante el día, no puedo estar pelotudeando acá toda la tarde.
BorrarLeía el artículo y vi:
“los que no votamos por ellos somos aliñas de charcas putrefactas”
A la mierda, al final sos un resentido más. que te pasó? tuviste un jefe macrista que te metía el dedo en el orto?
Viven en una ficción muchachos, se los repito.
El proyecto es una mentira.
La inclusión no existe, cada vez hay más pobres, vean las calles.
Yrateo, mi cerebro está amasado por los medios… ok, dejame preguntarte…
De verdad crees que Nisman se suicido?
De verdad crees que DeVido no se choreó MILLONES
De verdad crees que el tongo de lazaro baez lo inventó clarín?
De verdad crees que estas 90 leyes las sacaron para hacerle un bien a los trabajadores?
Muchaaachos, o son ingenuos, o nos toman por boludos.
Vamos! esfuercense más! Llamame además mediocre, cobarde, cerebro pequeño, decí que tengo una sola neurona, lo que quieras, demuestran su limitación para ver la realidad, agreden difaman, en fin, pensamiento crítico muchachos! están haciendo un papelon.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
BorrarAnónimo
ResponderBorrar1) Lo que le ocurrió a Nisman deberías preguntárselo a Bullrich y a Alonso, pues fueron ellas quienes asediaron al fiscal telefónicamente horas antes de su deceso.
2) ¿De verdad creés que Niembro no se robó 21 palitos?
3) Si el kirchnerismo tiene un Lázaro Báez, el macrismo tiene un Caputo.
4) No sé cuáles fueron las intenciones "reales" que llevaron al gobierno nacional a impulsar esas 90 leyes, pero al menos se votaron y se implementaron, salvo una. ¿Se puede jactar de tal republicanismo el alcalde de la ciudad de Bs As que vetó 130 leyes de 270 votadas en la legislatura?
Te das cuenta que por dónde lo mires la "mugre" está en todas partes. Por último quisiera dejar en claro que el gobierno entrante nunca me va a representar, pues soy trabajador y ellos son gerentes acérrimos de la patronal corporativa y agentes confesos de la embajada yanqui.